Déjame...
como se ve la luna y las estrellas
desde mi ojo izquierdo
Déjame enseñarte
el camino del amanecer
en la punta de un beso
que roza el horizonte de tus labios
Déjame enseñarte
a jugar a hacerle el amor al atardecer
entre las flores de amapola
que adornan nuestras mentes.
Déjame enseñarte
como la luna se sonroja
al verte entrar en la madrugada.
Déjame enseñarte
que se puede vestir de orgasmo el infinito…
Aun me falta mucho por aprender...
Lo siento...
Etiquetas: Poemas con Rostros, Seria Madrugada